"Hay conmoción en el periódico". Algunos periodistas del diario El País con los que ha hablado ELPLURAL.COM utilizan esos sustantivos, "conmoción", "desolación", "perplejidad"..., para explicar el sentimiento mayoritario en la redacción ante los nombramientos de subdirectores que la tarde del jueves se dieron a conocer.

Caño ha elegido gente de su entorno y manejable
"Es una locura", nos decía un veterano redactor, que abundaba en 'la explicación' con la que coinciden mayoritariamente en Miguel Yuste, sede del diario de PRISA: "Antonio Caño ha elegido entre gente de su entorno más próximo, y gente fácilmente manejable, para hacer una especie de 'guardia pretoriana' con la que llevar a cabo sus planes de transformar el periódico... Y todo, claro, con el apoyo de Cebrián".

El cambio que ha llevado a cabo Antonio Caño en la cúpula del periódico es total. Su primer nombramiento fue el de director adjunto, David Alandete. Como contábamos, un periodista de muy poca experiencia, que había trabajado con él en la corresponsalía de Washington. Ahora completa el cambio de cúpula, con la sustitución de todos los subdirectores, por gente que, como Alandete, tienen la característica de haber trabajado como ayudantes suyos, o ser sus amigos personales.

"En la redacción, la sensación general es de desolación absoluta", según periodistas del diario de PRISA. Foto El Pais



En dos años, del Master a dirigir el periódico
Los nombramientos son estos. Eva Sáiz, periodista contratada, con sólo dos años de experiencia, pasa a ser la subdirectora responsable de la edición en papel de El País. Sáiz, que concluyó el Máster del diario hace sólo dos años, como decimos, trabajó de becaria en la corresponsalía de Washington con Caño. Igual que Alandete. El nombramiento de Sáiz es el que más conmoción y desolación ha causado.

Luis Prados, que trabajaba bajo la dirección de Caño como director de la edición de El País para Brasil, será el responsable de las ediciones internacionales del diario. Prados, que sí es veterano, es amigo personal del director.

Bernardo Marín es el subdirector del que dependerá la edición digital. Según nos dicen en la redacción, Marín es un hombre con buena relación con sus compañeros, y es apreciado, pero en ningún caso se le consideraba candidato a ocuparse de la responsabilidad de elpais.com, una apuesta estratégica para el futuro de la empresa.

Mayte Rico, redactora, es el último nombramiento de Caño. Ella se hará cargo de la publicación del dominical.

Abrirse a 'nuevas mayorías'
Los nombramientos, que el propio Caño comunicó en la reunión de la tarde para tratar el contenido del periódico, causaron de inmediato conmoción entre los periodistas. Porque al tiempo han significado la salida de todos los veteranos más cualificados.

Entre los redactores del diario no se olvida el famoso 'email' que Caño envió a Cebrián e, involuntariamente, a otros redactores en el que despreciaba a la actual redacción, decía desconfiar de los directivos y anunciaba la necesidad de dar un giro a la ideología del diario para abrirlo 'a nuevas mayorías', lo que se entiende como 'derechizar' un diario que hasta ahora era el elegido por los lectores progresistas.