La Reina Sofía, la Infanta Elena, la Infanta Cristina e Iñaki Urdangarin en la visita que realizaron al Rey tras su operación de cadera. EFE



La estrategia de la Fiscalía del Estado, y particularmente del fiscal Pedro Horrach, en el caso Nóos se ha basado en desmarcar a la Infanta Cristina de los negocios de su marido y de sus empresas, pero los correos del entramado Nóos demuestran que no sólo la hija del Rey tomaba cartas en el asunto de aquellos, sino que la propia Casa Real estaba al corriente y jugó un papel de asesor en muchos de los asuntos, al menos a través del secretario personal de las infantas, Carlos García Revenga.

Urdangarin informó al Rey y al Príncipe
En un revelador correo electrónico, fechado el 21 de febrero de 2003, Urdangarin comunicó a potenciales clientes la creación de Nóos Consultoría Estratégica, antes de fundar el Instituto Nóos, la entidad supuestamente sin ánimo de lucro a través del que desvió fondos públicos. Entre los destinatarios de aquel mail incluyó a todos los miembros de la Familia Real, es decir, al Rey, al Príncipe Felipe y a su cuñada, la Infanta Elena.

Consultaba todo a García Revenga
Según algunos correos electrónicos de Nóos divulgados por El Confidencial, Iñaki Urdangarin daba detallada cuenta, de manera periódica, al secretario de las infantas, Carlos García Revenga, de sus actividades y proyectos, así como de pormenores como sus lecturas y conferencias a las que asistía.

Zarzuela supervisaba su agenda
Luisa Massuet, trabajadora del Instituto Nóos, envió un correo a García Revenga, el 28 de enero de 2005, para organizar la agenda de Urdangarin."Iñaki me pregunta cómo está el tema del acto del día 8 de marzo, Premio SAR Infanta Cristina, en Zamora. Es que esos días hay un congreso en Chicago al que quizás querrían ir. ¿Iñaki debe ir con ella [a Zamora]?". Massuet también le plantea un asunto protocolario: "Otra cosa es lo del tema del premio de la Llave de Barcelona. Iñaki me decía (...) que cree que quizás deberá aceptarlo. ¿Tú qué opinas?", escribía la empleada de Urdangarin.

Revisaba documentos de la relación de Nóos con ESADE
Los documentos fruto de las estrechas relaciones del Instituto Nóos y la escuela de negocios ESADE (donde era profesor el exsocio del duque, Diego Torres) también requerían del visto bueno de la Casa Real. En un correo electrónico del 15 de septiembre de 2004, Àngels Rosell, trabajadora de Nóos, envía a Marcel Planellas, entonces secretario general de Esade, el siguiente mensaje: "Te hago llegar unos archivos adjuntos de las conferencias públicas y después los enviaremos al señor García Revenga para la revisión protocolaria".

Personal de Zarzuela asesoraba en informática a Nóos
La Casa Real supervisaba hasta el material de oficina y equipos informáticos que se usaban en el Instituto Nóos. Lo prueba el correo electrónico, fechado el 14 de octubre de 2003, de un empleado de Zarzuela, al parecer del Equipo militar del Rey, bajo el asunto "Información impresora, proyector, PDA", en el que detalla cuáles son las marcas y modelos que han de ser adquiridos. Este correo se remite a García Revenga y a un mando del Ejército especialista en comunicaciones. El remitente se despide en un estilo castrense: “A tus órdenes”.

Se consultaba hasta para regalos a miembros de la Familia Real
Nóos también consultaba a la Casa Real asuntos personales, como refleja un correo fechado el 2 de noviembre de 2004 escrito por Luisa Massuet, la empleada de Urdangarin, que pregunta a Carlos García Revenga "la talla o edad" de los hijos de la Infanta Elena, Felipe Juan Froilán y Victoria Federica, "para un regalo que les quieren hacer a los nietos de Sus Majestades".