El Gobierno quiere que televisiones, cines e internet cataloguen su programación con un único sistema de símbolos, idéntico parta todos. Vuelven el rombo y los dos rombos, símbolos que marcaron a la primera generación española que creció ante el televisor y cuando sólo había dos canales: la 1 y la 2. Es previsible que las televisiones se opongan porque reaccionaron con fiereza ante el Gobierno de Zapatero para impedir cualquier regulación, esgrimen que lo que debe haber es "auto regulación" y acusaron a Zapatero de intentar poner censura. En el año 2004 el Gobierno socialista elaboró un código de autorregulación inspirado en la normativa europea que lo recogía todo. Bastaría con que las cadenas lo cumplieran, pero no lo hacen. Tele 5, la cadena que más virulentamente atacó cualquier intento de regulación del gobierno anterior, es la que más lo incumple. La conclusión es obvia, la auto regulación de las teles no funciona, de la misma manera que esta crisis ha demostrado que era falso que los mercados funcionaban mejor por sí solos y que los gobiernos y las leyes no debían ser para ellos. Así hemos acabado.

Dos rombos
En respuesta parlamentaria al diputado socialista Federico Butilo, el Gobierno ha respondido que está en fase de desarrollo crear "un sistema de pictogramas o imágenes identificativas que acompañen a las obras audiovisuales y que permitan al público identificar a priori contenidos específicos", según ha informado la agencia Europa Press. En televisión, cada cadena tiene su propio símbolo pero no siguen un criterio ni homogéneo ni, en ocasiones lógico. En el cine si funciona una regulación que elabora la Comisión de Calificación de Películas Cinematográficas (Ministerio de Cultura), y en internet la cosa es un caos. El objetivo es unificar simbología, pero la gran cuestión de fondo son los criterios: ¿que será apto para todos los públicos, qué para los mayores de 14 y que para los mayores de edad?Aquí está la gran cuestión.

'Sálvame' ¿Con un rombo o con dos?
España es el único país de la Unión Europea que no cuenta con un organismo estatal de regulación audiovisual. En el año 2.010 se creó el Consejo Estatal de Medios Audiovisuales impulsado por la ex Vicepresidente María Teresa Fernández de la Vega, pero nunca llegó a ponerse en marcha. El Gobierno del PP quiere aglutinar todos los organismos reguladores en uno solo, Comisión Nacional de los Mercados y Competencia, que dependería del Ministerio de Economía, pero la Unión Europea ha advertido que tal concentración quita independencia a los organismos de control y no le gusta la idea.

Con esta situación las cadenas de televisión ha ido por libre y es indiscutible además de escandaloso, el flagrante incumplimiento de la legislación aprobada por el Gobierno de Zapatero para las franjas de horario protegido infantil. Uno de los programas de más éxito de audiencia es 'Sálvame', dedicado al mundo del cotilleo y prensa del corazón. Es el programa 'bandera' de Tele 5 y se emite sin ningún tipo de clasificación, lo que significa que la cadena lo considera apto para todos los públicos (con sus imágenes de top less cuando no más explícitas, tacos en el lenguaje, insultos y relaciones íntimas como ingredientes diarios). Será curioso comprobar si con la catalogación que quiere hacer el Gobierno este programa tendría 'rombos' o ninguno.

Incumplimientos en otras cadenas
La autorregulación que agresivamente defendieron las cadenas privadas brilla por su ausencia. Ha sido la excusa perfecta para no hacer nada o incumplir el código que todas las cadenas firmaron en el año 2004. Así por ejemplo la primera temporada de la popular serie 'Juego de Tronos' se emitió hace un año en Antena 3 clasificada para mayores de 16 años cuando cualquier espectador la calificaría para mayores de edad. Solo en el primer episodio se ve un incesto y el asesinato de un niño.

Hasta Televisión Española se salta las normas, Telespectadores Asociados de Cataluña ha denunciado que el culebrón que emite la cadena pública "Las bandidas", está clasificado para mayores de 7 años cuando debería ser para mayores de 18. Y lo mismo ocurre con la serie "La que se avecina" que se emite en canales de Mediaset.