La vicesecretaria General del PSOE, Elena Valenciano, denunció hoy que el Gobierno quiera quitar a las mujeres “el derecho de gobernar sus vidas” con la reforma de la Ley del aborto y subrayó que “ningún ministro, ni ningún obispo es quién para decirle a las mujeres qué hacer con su cuerpo o con su maternidad”.

Durante una pregunta en el Congreso al ministro de Justicia, Alberto Ruiz -Gallardón, Valenciano denunció que “en la España de Rajoy los derechos se convierten en delito” y que “las mujeres que aborten sin su permiso irán a la cárcel y los profesionales las ayuden, también”, algo que “ya ha pasado en España”.

También van a abortar
La dirigente socialista se refirió también a la hipocresía en relación con este tema, ya que, en su opinión, lo que va a suceder con la ley que va a aprobar el Gobierno es “lo que ha pasado toda la vida de Dios: que las mujeres de su entorno social y económico van a poder viajar a 20 de los 27 países europeos donde tienen una ley como la nuestra, a abortar si así lo desean. Y las otras, esas a las que ustedes nunca ven y a las no conocen, también van a abortar, pero como no tienen medios económicos tendrán que hacerlo en condiciones mucho peores, jugándose la salud, la vida y también la cárcel”.



Son coherentes
Según la socialista, el Gobierno está preparando “una de las leyes de aborto más restrictivas del mundo occidental” y así España será el primer país que cuando legisla sobre el aborto retrocede, en eso tengo que reconocer que son coherentes, 30 años atrás como en todo lo que están haciendo”. En cualquier caso, apuntó que está ampliamente demostrado “que las leyes restrictivas no restringen el número de abortos”.

La mentira de las menores
“Está claro que la Conferencia Episcopal les reclama viejas deudas adquiridas en las cabeceras de aquellas manifestaciones y, por eso, va a hacer una ley muy restrictiva sobre el aborto”, añadió. Asimismo, Valenciano pidió al Ejecutivo “que deje ya de usar demagógicamente a las menores, que las mujeres de 16 o 17 años que abortan en este país no llegan al 0,5 % de los abortos y lo hacen, y ustedes lo saben, aquellas menores que viven en hogares en las que las violentan o están desamparadas”.