El ABC es el periódico más monárquico. Nada nuevo en esto. Casi podría decirse que incluso es el único entre los de la derechona que se mantiene fiel a la Corona. Nada más hay que ver el editorial que el periódico que fue de los Luca de Tena publica hoy. Es tal su amor a esa institución que el medio, ultramonárquico y ultracatólico, insinúa una petición hoy para que la Infanta Cristina haga algo sorprendente: separarse de Iñaki Urdangarín.

Defiende la inocencia de Cristina...
Que es monárquico más allá de cualquier duda lo va dejando claro el editorialista (o lo que es lo mismo, la dirección y la propiedad del periódico) párrafo tras párrafo. Así, se lee ya en el subtítulo una advertencia: "La igualdad ante la ley no puede acabar perjudicando los legítimos derechos a la defensa y la presunción de inocencia de la Infanta Cristina".

Y a partir de ahí exculpaciones, ideas resaltadas en negrita, línea tras línea: "Para el juez Castro, la imputación de la Infanta se produce no por lo que hizo, sino por lo que dejó hacer a otros". Y más tarde: "Queda claro que la Infanta Cristina no intervino personalmente en ninguno de los hechos delictivos que se imputan a su esposo".

'Que la Infanta realice gestos explícitos e inequívocos para asumir la gravedad de la situación', escribe ABC. Foto EFE



...antes de advertir que el "caso está generando un gran daño a la Corona"
Pero incluso el ABC tiene que aceptar la realidad y en un momento abre los ojos ante lo inevitable el editorialista y escribe: "este es un caso que está generando un gran daño a la Corona y que requiere ser visto en su justa proporción".

Pensamiento que le vale para dejar claras las dos ideas que mueven todo el texto y que confirman el carácter ultramonárquico del diario. Primero una proclama que subrayan con tal rotundiad que puede dar idea del miedo que parecen tener a que no sea compartida: "La Corona es tan valiosa, imprescindible y trascendental para España hoy -escribe el ABC- como lo ha sido a lo largo de nuestra Historia. La Corona es España".

Que la Corona no sufra más cargas de las ya impuestas por la conducta de Urdangarín
Y  para demostrar su convencimiento de este punto, el diario parece renunciar a su segunda identidad, el acérrimo catolicismo. Y escribe este último párrafo: "En todo caso, la trascendencia judicial de la imputación de Doña Cristina implica inevitables consecuencias institucionales, y la Infanta ha de ser consciente de esta circunstancia. Por esto, es conveniente que la Infanta realice gestos explícitos e inequívocos para asumir la gravedad de la situación y contribuir a que la Corona, en aras de poder cumplir con autoridad moral con su función, no sufra más cargas que las ya impuestas por la conducta, al menos irregular e inadecuada, de su esposo, Iñaki Urdangarín".

Para el ABC lo primero que tiene que hacer la Infanta parece, por tanto, blanco y en botella..., algo que a la Iglesia católica no le gusta.