Un nuevo borrador de la Ley de Mejora de Calidad Educativa (Lomce) del Gobierno tumba la inmersión lingüística en Catalunya al relegar la lengua catalana a materia "de especialidad". De esta forma, el catalán pierde el rango de troncalidad, y establece la proporcionalidad del castellano y el catalán en las escuelas públicas.

Así lo ha anunciado este lunes la consellera de Enseñanza de la Generalitat, Irene Rigau, en una rueda de prensa urgente en la que ha explicado que la nueva norma prevé que, mientras no se aplique, la Administración pague la enseñanza en castellano en centros privados de las familias que lo pidan.

"La mayor ofensiva"
Rigau ha deplorado que el texto "rompe el modelo de escuela catalana" y supone la mayor ofensiva contra el catalán desde 1978, después de que el Ejecutivo haya instado a las comunidades con dos lenguas oficiales a dar un trato equilibrado a la impartición de las asignaturas para alcanzar el 50% de proporcionalidad.

Optativa
Según Rigau, el borrador de Wert convierte al catalán en una asignatura “prácticamente optativa”, por lo que un estudiante podría sacarse el bachillerato o la ESO sin examinarse nunca de catalán.