El vicecanciller y ministro de Economía de Alemania, Philipp Rösler, reiteró hoy la frontal negativa de Berlín a la licencia bancaria para el fondo permanente de rescate, una de las opciones que se baraja en la zona del euro para flexibilizar los mecanismos de compra de deuda soberana con los que atajar la crisis. "La canciller, el ministro de Finanzas y yo estamos de acuerdo en que eso que se ha discutido ayer y hoy, la licencia para el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE), no puede ser nuestro camino", aseguró Rösler en una rueda de prensa en Berlín.

Alemania insiste en el control de la inflación
El ministro de Economía indicó que el gobierno de coalición de centro-derecha que encabeza la canciller Angela Merkel no quiere "una Unión de la inflación", sino una "Unión de la Estabilidad" basada en el pacto fiscal y el MEDE. "Ése es el camino correcto para estabilizar la eurozona", apostilló Rösler, para rechazar de seguido "todos las otras fórmulas" para salir de la crisis "por no ser adecuadas". Además, aprovechó para enviar un mensaje al Banco Central Europeo (BCE) y le conminó a "concentrarse" exclusivamente en la política monetaria, es decir, en su mandato de combatir la inflación.

El Bundesbank refuerza la advertencia
Con estas palabras rechazó la posibilidad de que el BCE intervenga más activamente en la lucha contra la crisis, como demandan varios países de la zona del euro como España e Italia. En el mismo sentido, el presidente del Bundesbank, Jens Weidmann, aseguró que el banco central alemán tiene "una voz más fuerte" en el BCE que la mayoría de sus homólogos en la eurozona y advirtió al presidente del BCE, Mario Draghi, de que el instituto emisor europeo debe mantener su independencia y no "sobrepasar su mandato". Según Weidmann, los políticos "esperan demasiado" de la acción del BCE.

Monti redobla sus esfuerzos diplomáticos
El primer ministro italiano, Mario Monti, embarcado en una ofensiva diplomática para ganar apoyos en la Eurozona, aseguró hoy a un diario finlandés que se está estudiando "una posible intervención en varias combinaciones que impliquen al (fondo temporal de rescate) FEEF, al MEDE y al BCE. Monti se ha reunido hoy en Helsinki con el primer ministro finés, Jyrki Katainen, se entrevistó ayer con el presidente francés, François Hollande, y se desplazará mañana a Madrid para analizar la situación de la zona del euro con el presidente español, Mariano Rajoy.

A la espera de Draghi
Draghi había asegurada la semana pasada que la autoridad monetaria estaba dispuesta a actuar de forma contundente y expertos e inversores esperan que mañana concrete su anuncio tras la reunión del comité ejecutivo de la institución. El consejo de gobierno del BCE se reúne este jueves en la sede central de la entidad en Fráncfort para tratar la política monetaria de la zona del euro. Los mercados descartan que el BCE vaya a bajar de nuevo su tasa de interés rectora, tras haberlo hecho a comienzos de julio, pero esperan señales de Draghi para aliviar las presiones sobre la deuda española e italiana. De hecho, desde que anunciara que iba a actuar, la prima de riesgo de ambos países empezó a bajar, aunque sigue en niveles muy altos. La prima de riesgo española bajó hoy hasta 536 puntos básicos, 10 menos que la jornada previa.