La denuncia había sido presentada por el Movimiento de Ciudadanos hacia la República Constitucional (MCRC), que basó su escrito en el supuesto que sentó al expresidente valenciano Francisco Camps en el banquillo: que una autoridad puede cometer el delito de cohecho impropio si recibe regalos por razón de su cargo, sin que por ello haga falta una contraprestación a cambio.

La condición de inviolabilidad del monarca
La Fiscalía Anticorrupción, en un escrito fechado el pasado 23 de mayo, al que ha tenido acceso el diario  Público,  explica que  la imputación contra el Rey "no puede prosperar"  a pesar de estar el cohecho impropio incluido en el Código Penal, en el título referido a los delitos contra la Administración Pública. Pero el obstáculo más grande para el Ministerio Público es que "se aúna la condición de inviolabilidad del Rey de España, así dispuesto en la Constitución".

Una monstruosidad
El abogado que actúa en nombre del Movimiento de Ciudadanos hacia la República Constitucional (MCRC), José Luis Escobar, ha considerado, en declaraciones a Público, que el archivo es una "monstruosidad", porque situar al monarca "por encima de la ley" significa "devolver al país no sólo al Medievo, sino a la Antigüedad".

El Rey, como un tirano
"¿El Estado no puede perseguir al monarca si da un golpe de Estado, no puede hacer nada si cometiera un presunto delito de robo, violación o asesinato? ¿No hay nadie para exigirle responsabilidades? Según las tesis de la Fiscalía, cualquier ciudadano tiene que doblegarse ante el Rey, y el Estado renuncia a defender la vida y el interés legítimo de los ciudadanos. El Ministerio Público reviste al Rey del ropaje personal de un tirano, viene a decir que está fuera de la ley", ha apuntado este letrado.