No había pasado nunca. Y no es habitual que las siete grandes potencias del mundo englobadas en el G-7 celebren reuniones extraordinarias. Lo harán hoy, por videoconferencia, y en ella los responsables económicos de Estados Unidos, Canadá, Japón, Inglaterra, Alemania, Francia e Italia abordarán la grevedad de la crisis financiera española que ha disparado la prima de riesgo por encima de los 500 puntos básicos y ha hundido a la bolsa española por debajo de los 6.500 puntos. Hay otro dato que alarma más: la brutal fuga de capitales de España, de casi cien mil millones de euros en el primer trimestre, puede tener repercusiones mundiales.

Grecia y España en el mismo saco
Definitivamente todo el mundo mete ya a España en el mismo saco que a Grecia. En la reunión extraordinaria que hoy celebrará el G-7 el tema principal es España, pero también se analizará  la incertidumbre política en Grecia que repetirá elecciones ante la incapacidad de formar gobierno. El anterior presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, siguió la estrategia de mantener a España siempre pegada a Italia y nuestra prima de riesgo se situaba siempre a la par, si no por debajo, de la italiana. Ese seguro ha desaparecido y para tranquilidad de los italianos nos hemos pegado ya al pelotón de Grecia, Irlanda y Portugal.

Mucha preocupación por España
La reunión sorpresa del G-7 ha sido desvelada por la agencia Reuters, especializada en temas económicos. Una fuente del G-7 desveló a dicha agencia que "hay mucha preocupación por la situación bancaria en España", que se ha disparado la alarma por la fuga de capitales y que la huida de dinero de España "podría tener repercusiones más allá de la zona euro".

En definitiva, la dudas sobre Europa provocadas por la crítica situación de Grecia y España y la negativa de Alemania a que actúe el Banco Central Europeo preocupa ya a todas las grandes potencias porque la economía y las finanzas son un sistema global. El ministro de Finanzas de Canadá, Jim Flaherty, confirmó la convocatoria de la reunión, que tendrá lugar a última hora de la noche en el horario asiático.

Presiones sobre Alemania
Crecen las presiones sobre Alemania para que acepte la propuesta del Gobierno español de que los bancos puedan acceder directamente al fondo de rescate europeo sin que lo tenga que pedir el Estado al que pertenecen, lo que significaría una intervención. Hoy toda la prensa informa de que el ministro de Economía francés y el comisario europeo de Asuntos Económicos se han mostrado a favor de esta opción, pero Alemania sigue sin mover ficha. Y lo que preocupa a gobiernos e inversores, en caso de que Alemania permitiera que los bancos pidieran directamente el rescate sin que España tuviera que ser intervenida, es la reforma comunitaria que llevaría meses y podría no llegar a tiempo antes de que a España le resultara imposible financiarse.