El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, se vio obligado a comparecer ante los medios de comunicación para intentar calmar el tsunami que se cernía sobre España tras el agujero negro descubierto en Bankia. Curiosamente Rajoy dio su primera rueda de prensa en solitario el mismo día que la "biblia" del mundo financiero y económico internacional, el Financial Times, afirmaba en sus páginas que Rajoy es "el presidente que más tiempo ha estado en silencio" y le pedía directamente que "alzara la voz para restaurar la confianza en los bancos".  Pero Rajoy afirmó que el Gobierno todavía no tiene claro como salvará a Bankia, es decir, el Gobierno no tiene un plan de acción para una situación de emergencia y el asombro fue absoluto entre los gobiernos y mercados internacionales. El resultado de la rueda de prensa de Rajoy es una debacle económica con la prima de riesgo batiendo otro record esta mañana al llegar a los 514 puntos, y la bolsa española hundida en niveles catastróficos, esta mñana perdió los 6.400 puntos.

Empresarios y banqueros españoles esperan una respuesta
Empresarios y banqueros guardan un silencio sepulcral. Temen al Partido Popular. Con esta situación y un gobierno socialista estarían disparando sin piedad desde todos los medios de comunicación. Pero que estén callados por puro temor a represalias no quiere decir que estén contentos, en realidad la clase empresarial y financiera española no sale de su asombro ante la inactividad del Gobierno y la pregunta que circula hoy por Madrid es: ¿cómo se le ocurre al presidente del Gobierno decir en rueda de prensa que aún no sabe como arreglará lo de Bankia y el resto de bancos españoles? Y para colmo el ministro de Asuntos Exteriores contradijo el mismo día a su amigo y presidente del Gobierno. García Margallo declaró que "no estaba determinado" si se pediría dinero a Europa. Nadie creyó al presidente del Gobierno de España cuando dijo que los bancos españoles no tendrán que ser rescatados. Y eso es muy grave.

Las cifras del hundimiento
Ayer el Gobierno se empleó a fondo para extender el argumento de que la prima de riesgo "no es determinante". Tertulianos de la derecha mediática se dedicaron a decir que no tenía importancia que la prima de riesgo superara los 500 puntos básicos cuando hace siete meses, con los 463 de máximo al que se llegó en la etapa Zapatero, lanzaban mensaje apocalípticos. A menos de 24 horas de la rueda de prensa de Rajoy los números son absolutamente implacables con el Gobierno y con la derecha mediática, a la que por cierto no le queda más remedio que reconocer que el presidente del Gobierno se equivocó al comparecer en la sala de prensa del PP. Si es presidente de todos los españoles no debe comparecer ante ellos en un día crítico en la sede de su partido político.

Lo que dicen los manuales sobre las cifras es lo siguiente:

1.-La prima de riesgo (la diferencia de precio entre el bono alemán a 10 años y el español) no debe superar en una economía saneada los 250 puntos básicos. Lo dijo públicamente Francisco Gónzalez, presidente del BBVA y conocido como "el banquero del PP" cuando Zapatero gobernaba, ahora FG es de los que guarda silencio.

2.-Cuando la prima de riesgo supera los 500 puntos básicos y los intereses que tiene que pagar un país para financiarse se sitúan en el 6,5%, es prácticamente imposible para un país conseguir financiación. Y si no consigue financiación no puede pagar. Y si no puede pagar quiebra.

3.-Cuando la Bolsa pierde más de la mitad de su valor en seis meses es que la economía de ese país se hunde. Los economistas situaron la barrera psicológica límite del Ibex 35 en los 6.800 puntos. Hace semanas que se perdió ese nivel y ha ido de mal en peor. Cae a un pozo sin fondo y la bolsa española está en los 6.300 puntos. Los bancos se han desplomado.

4.-Cuando el paro supera el 15% de la población activa la situación es mala. Si supera el 20% es dramática. España tiene actualmente un 25% de paro.

5.-Sin el seguro de Italia, España puede caer. La afirmación de que España es demasiado grande para caer y ser rescatada es falsa. También lo era el gigante norteamerica Lheman Brothers del que se decía que no podía caer y cayó, arrastrando a todo el sistema financiero norteamericano y provocando la peor crisis financiera desde la Segunda Guerra Mundial. Lo que sí es cierto es que España e Italia no pueden caer juntas sin que se hunda la zona  euro. Por eso el Gobierno de Zapatero se obsesionó por mantener la prima de riesgo no ya en los mismos niveles que la italiana, sino por debajo. Ahora hemos perdido ese seguro y, para tranquilidad de los italianos, España ve como se dispara su prima y le cuesta muchísimo más conseguir financiación.

Deuda pública impagable
En los Presupuestos Generales del Estado de este año el Gobierno dice que cerrará el ejercicio con un nivel de deuda pública del 79,8%. Pero si el Gobierno dice que rescatará los bancos en solitario sin pedir ayuda a Europa, cosa que está por ver, y tiene que poner encima de la mesa 50.000 millones de euros más (19.000 solo para Bankia), entonces disparará la deuda pública al 85% del Producto Interior Bruto (PIB). Pero si además se le suma la deuda de empresas y sociedades estatales, otros 59.000 millones de euros, entonces la deuda llegará al 90% del PIB, y los economistas dicen que cuando un pais tiene un 90% de deuda ya no puede devolverla. Y eso es quiebra.

Rajoy está disminuyendo el déficit a costa de aumentar la deuda, y al final eso es el timo de la estampita. Desde que el PP gobierna la deuda pública ha aumentado un 11,3%, mientras que en la segunda legislatura de Zapatero, en pleno huracán de la crisis, la deuda aumentó un 7,5% anual excepto entre los años 2008 y 2009 donde subió al 13,5%.

Gobiernos e inversores internacionales dan por seguro que el estado español no tiene dinero para rescatar a sus bancos.