Wert no perdió tiempo para anunciar su hachazo a Educación para la Ciudadanía. No debió resultarle fácil al ministro encontrar argumentos contra los que rebatir una asignatura que aplaudieron amplios sectores de la sociedad, entre ellos miembros de la comunidad educativa. En una entrevista en la SER, en febrero, tras asumir su cargo, Wert echó mano de una frase contra el capitalismo que, según dijo, estaba sacada de un libro de texto de Educación para la Ciudadanía, pero que en realidad pertenecía a un ensayo crítico con la propia asignatura. La frase en cuestión era: "Los capitalistas son como ratones que corren en la rueda cada vez más deprisa".

La manipulación de Wert no tardó en descubrirse. Se trataba de un extracto del libro Educación para la Ciudadanía. Democracia, Capitalismo y Estado de Derecho (2007, Akal), un ensayo contra la asignatura. La editorial que publicó la obra salió a aclararlo.

Wert anunciará los cambios el jueves
El jueves próximo, Wert propondrá los cambios que se introducirán en la asignatura, que pasará a llamarse Educación Cívica y Constitucional, y que se imparte en los cursos de 2º o 3º de ESO, dependiendo de la comunidad autónoma.

La homosexualidad, tema tabú
La propuesta, a cuyo contenido ha tenido acceso El País, elimina la única mención del decreto 1631/2006 a la homosexualidad, y a la homofobia; referencias a las “actividades sociales que contribuyan a posibilitar una sociedad justa y solidaria”; e incluye conceptos como nacionalismos excluyentes, terrorismo, el papel de la iniciativa económica privada “en la generación de la riqueza” o el respeto a la propiedad intelectual.

Racismo, xenofobia, sexismo, también fuera
El ministerio de Educación borra un párrafo completo sobre el aprendizaje de “la valoración crítica de la división social y sexual del trabajo y de los prejuicios sociales racistas, xenófobos, antisemitas, sexistas y homófobos”.

El compromiso social molesta al Gobierno
Educación para la Ciudadanía tenía como uno de sus objetivos más firmes preparar a los alumnos para “una actitud de compromiso” social, una frase que ha sido borrada en el nuevo texto. También desaparece la referencia a la “compensación de las desigualdades”, “el rechazo de las discriminaciones provocadas por las desigualdades personales, económicas o sociales” o la referencia a “riqueza y pobreza”.

Un giro ultraconservador
Con su giro ideológico, ultraconservador, el Gobierno del PP satisface los obispos, muy críticos con esta asignatura, desde su creación. La Conferencia Episcopal Española acusó al Gobierno socialista de “atentar contra la libertad religiosa y la libertad de enseñanza” de los colegios católicos y alentó durante años a las familias para que se opusiera a ella alegando objeción de con ciencia.

“Los padres harán muy bien en defender con todos los medios legítimos a su alcance el derecho que les asiste de ser ellos quienes determinen la educación moral que desean para sus hijos”, afirmó el portavoz de la Iglesia, Juan Antonio Martínez Camino, en 2007.