De ser así, los trabajadores asumen que La Gaceta dejaría de publicarse en papel. De hecho, en una de las asambleas de trabajadores celebradas esta semana se compara la situación que atraviesa el rotativo de Intereconomía con la que en su día vivió Público. En cualquier caso, los trabajadores esperan que al menos pueda mantenerse la edición de La Gaceta en Internet.

La versión de Intereconomía
La dirección del Grupo Intereconomía se muestra más optimista respecto al futuro de La Gaceta. Fuentes de la dirección han explicado a ELPLURAL.COM que todavía están en negociaciones con el Comité de Empresa (formado en su totalidad por miembros del sindicato anarquista CNT), aunque esperan que en ningún caso el ERE afecte a más del 30 por ciento de la plantilla. Asimismo, desde Intereconomía aclaran que no se ha discutido con el Comité de Empresa la posibilidad de que La Gaceta o Época (su suplemento dominical) dejen de publicarse en papel.

Malestar en la redacción
“Intereconomía está desmantelando la redacción de La Gaceta. Julio Ariza ha dejado de creer en la viabilidad económica del periódico. Es imposible que podamos salir a la calle si la plantilla se reduce aún más”, explica a este periódico un redactor del diario editado por Intereconomía. Según este periodista, la tensión en la sede del grupo de comunicación  es máxima pese a que los trabajadores ya han cobrado la totalidad de las nóminas que les adeudaban desde hacía varios meses. Esto ha sido posible gracias a un crédito de varios millones de euros que la empresa de comunicación recibió a principios del mes de mayo por parte de una importante entidad bancaria.

Al menos 200 despidos
Pero si la situación es mala en La Gaceta, peor pinta tiene aún en el resto de las filiales del grupo de comunicación. De hecho, Intereconomía ha reconocido públicamente que pretende despedir a más de 200 trabajadores (de un total de 700). En una segunda fase, el ERE podría afectar a otro importante número de periodistas.

Más que rumores
Se confirma así la información que ELPLURAL.COM desveló el pasado 20 de abril bajo el título de “Temor entre los trabajadores de Intereconomía, que podrían ver reducidos sus sueldos e incluso ser despedidos de forma masiva”. En concreto, este diario explicaba que el plan para sanear las maltrechas cuentas de Intereconomía (con una deuda superior a los 30 millones de euros) iría más allá que una simple rebaja salarial. Los directivos del grupo señalaron entonces que lo publicado no eran más que “rumores” emitidos en “panfletos digitales que pretenden desestabilizar a la empresa”.

Dagnino estaría negociando una salida
El anuncio del ERE se produce justo cuando Enrique de Diego, fundador de Intereconomía y autor del libro Dando Caña, sitúa a Alfredo Dagnino en la emisora de los obispos. Según de Diego, que fue abruptamente despedido de Intereconomía, el ex presidente de la Asociación Católica de Propagandistas estaría negociando con Rouco Varela su fichaje por la cadena COPE. Posibilidad que no acabaría de ver con buenos ojos el actual presidente de la radio episcopal, Fernando Jiménez Barriocanal.

El plan de Rouco para la COPE
Desde luego, el descontento de Rouco Varela hacía la actual línea editorial de la cadena COPE viene de largo. El arzobispo de Madrid considera que la emisora está demasiado escorada hacía el entretenimiento y el deporte, apenas influye en la conformación de la opinión pública y está muy alejada de lo que para él debería constituir un importante instrumento de evangelización. En este sentido, el cardenal considera que Dagnino podría realizar una importante labor en la emisora propiedad de la Conferencia Episcopal.

La COPE vs. Intereconomía
El problema estriba en que la salida de Dagnino de Intereconomía para recaer en la cadena COPE se vería con muy malos ojos desde el grupo de comunicación de Julio Ariza, quien hace unos meses intentó un acuerdo con la emisora de los obispos que le permitiera sanear sus cuentas. Acuerdo que finalmente no se produjo debido al mal concepto que Rouco Varela tiene de Ariza.