Nada más que decir
A su salida de los Juzgados de la capital balear, Jaume Matas ha explicado a los periodistas que hace dos años ya declaró por el caso Palma Arena ante el juez y que se reitera "íntegramente" en lo que dijo entonces. "Y no tengo nada más que decir", ha puntualizado. En aquella ocasión, el expresidente popular señaló que su función era estrictamente "política" y responsabilizó del día a día y de la formalización de los contratos a los responsables de cada organismo público, como era el caso de José Luis Pepote Ballester, ex director general de Turismo.
Lo volvería a hacer
El expresidente balear declaró hace dos años ante el magistrado que recomendó firmar los acuerdos para la celebración de dos foros sobre turismo y deporte -en 2005 y 2006- y que, de hecho, "lo volvería a hacer", al asegurar que "todo se hizo de forma correcta" y defender la utilidad de los convenios y su tramitación.
Delitos de falsedad documental, prevaricación, fraude y malversación
Una hora antes de su cita judicial, a las 09.00 horas, Matas llegó a los Juzgados de Palma en un taxi en compañía de su abogado, Antonio Alberca, y de inmediato se introdujo en el edificio judicial.
José Castro, titular del Juzgado de Instrucción 3 de Palma, había citado a Matas como imputado a las diez de la mañana dentro de la pieza del caso en la que se investigan los supuestos delitos de falsedad documental, prevaricación, fraude a la Administración y malversación de caudales públicos en torno al instituto que fue presidido por Iñaki Urdangarin. El Instituto Nóos organizó para el Ejecutivo balear los dos eventos de turismo y deporte Illes Balears Fórum en virtud de sendos convenios de 1,2 y 1,1 millones firmados con el Govern balear.
Las preguntas de un diputado socialista desvelaron la trama
Las presuntas irregularidades alrededor de los contratos adjudicados al entramado Nóos salieron a flote por las preguntas planteadas en 2006 por el diputado socialista Antoni Diéguez en el Parlamento balear sobre el destino que dio la fundación de Iñaki Urdangarin al dinero que cobró del Gobierno de Matas. Según los investigadores, el duque de Palma y su exsocio Diego Torres se apoderaron de 5,8 millones de los fondos públicos que percibió la entidad, supuestamente sin ánimo de lucro.
