Según la querella de la Fiscalía, a la que ha tenido acceso El Mundo, la jueza habría dictado resoluciones “arbitrarias, inmotivadas y sin la mínima base fáctica que las pudiera justificar” en el llamado caso Moma.

Trato de favor a uno de los implicados
La Fiscalía explica en su querella que el origen de este asunto está en la denuncia cursada por un socio de la discoteca Moma contra otro accionista en el juzgado en el que Cillán estaba de guardia. La jueza “se posicionó desde un principio a favor de la parte denunciante con una serie de resoluciones en beneficio de la misma”, apunta el texto.

"Por mis santos cojones se precinta Moma"
Coro Cillán pidió “vehementemente” a la fiscal de guardia que se posicionara a favor del cierre de la discoteca y a pesar de no conseguirlo aplicó esa medida cautelar, sin practicar ninguna diligencia ni oír a la parte denunciada.

La fiscal del juzgado, Soledad García, que estaba de guardia con Cillán el día del precinto de la discoteca, declaró que la jueza ignoró su opinión de que antes de cerrar el local debía comprobarse la veracidad de la denuncia. Según García, la magistrada afirmó: “Por mis santos cojones se precinta Moma”.

Siguió con el caso, aunque no le correspondía
A pesar de que no le correspondía llevar ese caso, al día siguiente la jueza siguió adelante con la causa, levantó el precinto y, sin dar audiencia al fiscal, nombró administrador judicial de la discoteca a una persona “con la que tenía una relación de íntima amistad” y le designó apoderado de una cuenta corriente que ordenó abrir para canalizar los ingresos y gastos de la sociedad.

La Audiencia desautorizó a la jueza
En enero, la Audiencia de Madrid declaró nulas las decisiones de la jueza, “poniendo de relieve la carencia de fundamento tanto del precinto como de la administración judicial, así como la falta de competencia de la querellada”, recuerda la querella interpuesta por la Fiscalía.

La Fiscalía pidió autorización a Torres-Dulce
La semana pasada, la Fiscalía de Madrid había pedido autorización al fiscal general del Estado, Eduardo Torres-Dulce, para interponer la querella contra la magistrada.

Intentó reabrir el caso del 11-M
Coro Cillán es la polémica jueza que en 2009 se propuso reabrir el caso del 11-M, convirtiéndose en la heroína de El Mundo y La Gaceta y su teoría de la conspiración. La jueza llegó a citar a los directivos de Renfe cuando se produjeron los atentados para interrogarles sobre el destino que dieron a los trenes donde explotaron las bombas.