El periodista Ignacio Escolar, en su blog Escolar.net, considera que “no debería ser necesario endurecer la legislación para castigar a esos pocos” que protagonizan actos violentos porque “son delitos que ya están penados”. En su opinión, “ los planes del Gobierno utilizan los anecdóticos actos vandálicos como coartada para poner sordina al legítimo cabreo de la ciudadanía”.

Política de mano dura
“Es obvio que el Gobierno no está esperando a cambiar la ley para aplicar la política de mano dura, que forma parte de una estrategia muy estudiada contra el 15-M y otros movimientos de protesta”, afirma Escolar.

Recogida de firmas contra la ley
En Internet  se organiza una recogida de firma contra la ley. En Actuable, la iniciativa de un ciudadano particular suma ya alrededor de 27.000 seguidores, en el momento de redactar esta noticia. La movilización recuerda que “criminalizar la protesta civil atenta contra los Derechos Humanos”.

Los derechos constitucionales
“Una sentada no autorizada frente a la Policía podrá ser calificada como atentado contra autoridad” con pena de prisión incluida, explica esta iniciativa que cita artículos de la Constitución que podrían verse vulnerados con la norma del Gobierno popular.

Volver 50 años atrás
“Aprobar leyes que fueron derogadas hace 50 años no significará mayor seguridad para los españoles, ni siquiera para los que no protestan. Significará aumentar la crispación, la protesta y objeción de conciencia ante los abusos que maltratan a las personas más débiles de nuestra sociedad. Sr. Ministro, no apague el fuego con gasolina”, se afirma en esta iniciativa.

La algarada de Guardiola
En la Red los internautas acucian su imaginación y puede encontrarse de todo contra esta ley, desde duros comentarios como que “España volverá a tener presos políticos” hasta ocurrentes viñetas como una en la que aparece una caricatura de Guardiola con el texto: “El sábado 21 a las ocho de la noche todo el mundo al Nou Camp para apoyar al Barça hasta morir…” y recuerda que “convocar algaradas por Internet llevará a la cárcel a sus promotores”.

El 15-M critica la medida
El diario Público recoge las declaraciones de intelectuales, abogados y ciudadanos en general vinculados al movimiento 15-M que consideran que el Gobierno pretende instaurar el “miedo”, en “un ejercicio de amedrentamiento y tensión social “.

"La reforma, desde un punto de vista jurídico, es una locura, ya que hay una delgada línea roja entre la desobediencia, la resistencia y el delito de atentado a la autoridad", explica el responsable de la editorial La Felguera, el abogado Servando Rocha.

El Gobierno teme a la movilización pacífica
Carlos Taibo, profesor de Ciencia Política en la Universidad Autónoma de Madrid, cree que el Gobierno teme al 15-M. "Andan desesperados por la concepción no violenta del 15-M y tienen que recurrir a este tipo de decisiones, que producen estupor y escapan a todo tipo de fundamento racional". A su juicio, la medida del Gobierno “es un globo sonda para amedrentar a la gente y evitar las asambleas".

La derecha médiatica aplaude el "acierto" del Gobierno
Estas opiniones difieren de los medios de la derecha, que aplauden con entusiasmo la medida. En La Razón, un editorial la considera un “acierto de Fernández Díaz contra los violentos” y subraya que “el Gobierno trabaja en una reforma del Código Penal para endurecer el castigo a los actos de vandalismo callejero. La delincuencia organizada adquiere múltiples caras. Disfrazarse de antisistema y atacar a los ciudadanos o sus propiedades no puede quedar impune”, agrega el diario marianista.

Por su parte, La Gaceta intenta convencer de que se trata de “un endurecimiento de la ley para que no se vuelvan a repetir las situaciones violentas que se han visto durante las últimas manifestaciones”.

Los carnés de buenos y malos ciudadanos
El columnista Iñaki Zaragüeta escribe: "A mí, como a todo ciudadano de bien, me parece un avance. Una muestra de país desarrollado el anuncio del ministro del Interior de incluir como 'delito de integración en organización criminal' alterar el orden público y concertar concentraciones violentas por cualquier medio de comunicación como Internet y las redes sociales". A este comentario responde el periodista de El País José María Izquierdo, que le pregunta "¿dónde se dan esos carnés, que a usted le han calificado de buen ciudadano y, por consiguiente, a mí lo harían de malo?".