¡Menudo embustero!
Pero Sarkozy, con las elecciones presidenciales a la vista -y con las encuestas no muy favorables en clave de segunda vuelta- se ha acogido a ese refrán español tan adecuado para los cínicos: “Donde dije digo, digo Diego”. ¡Menudo embustero es este oportunista sin principios ni escrúpulos! Es un notorio cantamañanas, dispuesto a todo por un voto.
Mandobles a los socialistas hispanos
La gestión de Zapatero –alabada por Sarkozy incluso públicamente- ha pasado de la felicitación al estercolero. No quiere el mandatario francés que ahora se le confunda con Zapatero. Ha preferido agarrarse a las teorías facciosas del Partido Popular, cuyos dirigentes disfrutan estos días leyendo o escuchando al presidente de la República gala dando mandobles a los socialistas hispanos.
El mencionado chisgarabís
O sea, que si todo este montaje del mencionado chisgarabís francés -que se cree el nuevo Rey Sol y se equivoca- acaba enturbiando aún más la situación económica y social de España, a nuestra patriótica derechona le importará un comino. Mariano Rajoy no ha abierto todavía la boca para defender, en este rifirrafe con Sarkozy, los intereses de España.
Las verdades del barquero
François Hollande mantiene fluidas relaciones con Alfredo Pérez Rubalcaba, que se trasladó a París para darle ánimos y desearle suerte en las elecciones de abril/mayo. Comenzó su campaña cantando, respecto a los mercados, las verdades del barquero. Tuvo el coraje democrático que muchos otros no han tenido. Sarkozy le insulta y dice a los suyos que es un “imbécil”.
Agua de mayo
Pero Hollande saca pecho y le reprocha sus ataques al PSOE. La victoria del socialismo francés, probablemente respaldado por la izquierda más radical, no es imposible. Le vendría como agua de mayo a Francia. También a España.
Enric Sopena es director de ELPLURAL.COM
