La reforma laboral acaba de entrar en vigor, pero lejos de significar una vía para hacer frente a estas cifras, como dice el Gobierno, los hechos lo que vienen a mostrar, según han comentado a ELPLURAL.COM en fuentes sindicales, es que está significando ya y de inmediato una vía de salida fácil por la que las empresas ‘limpien’ sus plantillas. Y además, que lo hagan barato. “Cada día nos están llegando –nos han dicho estas fuentes sindicales- más y más casos, tanto de empresas privadas como también públicas, de trabajadores a los que se les está despidiendo conforme a las reglas de la nueva reforma laboral”.

Aceptar o ser despedido
“Lo que ha hecho el Gobierno –ha dicho a este periódico Toni Ferrer, secretario de Acción Sindical de UGT- con esta reforma no es otra cosa que abaratar y dar facilidades para despedir. Si se analizan las medidas de la reforma, la flexibilidad interna, la rebaja salarial.., incluso lo que llaman el absentismo, que alguien enferme y con baja médica falte un 25% de los días durante un par de meses…, todo al final en esta reforma lo que lleva es a que el trabajador acepte las reglas que imponga el empresario, o el despido”.

Los sindicatos, según han reconocido fuentes de las organizaciones de trabajadores a ELPLURAL.COM, aún carecen de cifras globales exactas sobre la repercusión de la reforma en las cifras del paro de este mes, pero están recibiendo continuas y crecientes denuncias en ese sentido y recuerdan que la principal vía de contratación que vendía el Gobierno, los contratos de emprendedores, no crean expectativas reales de contratación, “sino de rotación continua, ya que al poner ese año de prueba sin derecho a indemnización para el despedido, no van sino a perpetuar la temporalidad”. Un hecho especialmente doloroso teniendo en cuenta que más del 90% de los contratos que se hacen en estos momentos ya son temporales.

Triple pérdida de seguridad laboral
Toni Ferrer advierte que la reforma laboral significa una pérdida de seguridad triple para el trabajador, ya que “amplían las causas del despido, y las convierten en más ambiguas, lo que ya está viendo que crea problemas a los jueces, es decir, que crea una inseguridad jurídica; pero además también ha debilitado el control administrativo, al quitar el preceptivo permiso de las autoridades a la concesión de los ERE’s, lo que incluso ha sido criticado por las CC.AA. que se quedan sin herramientas para proteger el empleo en sus territorios; y por último, rebaja la protección sindical, al debilitar la posibilidad de la negociación colectiva”.

Un cierto estado de indefensión, dice a ELPLURAL.COM el dirigente de UGT, sin precedentes históricos –“incluso Aznar, antes de imponer el decretazo del 2000 nos informó y consultó como es preceptivo”- y que se está escenificando en las reuniones, vacías de contenidos y avances que se están produciendo entre sindicatos y Gobierno: “en cada reunión, y ya hemos tenido tres –dice a este periódico Toni Ferrer- nos advierten que las negociaciones no pueden producir ningún cambio sustancial en la propuesta del Gobierno, así es que resultan inútiles”.

La negociación sindical, maquillaje
Se puede deducir, por tanto, que el Gobierno está utilizando estas reuniones tan sólo como forma de maquillar lo que es una imposición. “No hay que olvidar –nos dice el líder de UGT- que Cándido y Toxo ya han enviado una carta a Rajoy, que no ha recibido ninguna respuesta. Y hoy mismo (viernes) le acaban de enviar otra proponiéndole nuestras alternativas, para que vean en el Gobierno que tenemos deseo de negociar, pero…”