“Ha sido vergonzoso, un verdadero ejemplo de falta de democracia”. Así se pronunciaban ayer desde UGT Huelva, cuya directiva provincial fue desalojada por la fuerza del Ayuntamiento de Bollullos. El secretario general del sindicato, Jorge Puente, y muchos de sus compañeros, habían acudido al primer pleno de la legislatura para mostrar su apoyo a los trabajadores despedidos a los que el equipo de Gobierno se niega a readmitir pese a contar con el respaldo de los tribunales, según informa Odiel Información.
Les apagaba los micrófonos
Mientras el colectivo de despedidos se manifestaba frente al Ayuntamiento, donde llevan acampados desde principios de la semana pasada, varios miembros del sindicato entraron en el salón de plenos, donde presenciaron como “cada vez que algún concejal de la oposición le preguntaba al alcalde –Francisco Díaz Ojeda, de IxB– por el asunto de los despedidos, éste le apagaba el micrófono y no le dejaba hablar”. Así, “no permitió que se abordase ningún tema que él no quisiera, y el ambiente se fue poniendo tenso”.
"El alcalde llamó a la policía"
Cuando desde el público –donde además de UGT también se encontraban vecinos y simpatizantes tanto de los distintos partidos políticos como del colectivo de despedidos– comenzaron los reproches a la actitud de Díaz Ojeda, “el alcalde llamó a la Policía, que procedió a un desalojo forzoso ante la resistencia del público asistente”.
Se utilizaron las esposas para los que se resistían
Según se aprecia en un vídeo grabado en el momento del desalojo al que ha tenido acceso esta redacción, la Policía llegó a empujar a quienes se resistían a abandonar el salón de plenos –entre ellos, Jorge Puente–, e incluso utilizó las esposas para evitar la resistencia de algunos.
