El ex presidente del Gobierno, José María Aznar, quiso que el primero de los actos que va a protagonizar en la precampaña electoral fuera en Estepona. No fue capricho ni casualidad. Para el Partido Popular, Estepona es una pieza clave y fundamental en el puzzle de municipios que, dependiendo del resultado del 22 de Mayo, pueden hacer que la Mancomunidad de Municipios de la Costa del Sol, poderosísimo ente de poder político y económico así como la influyente Diputación provincial, ambas en manos de los socialistas con el apoyo de IU, puedan seguir al frente de las fuerzas progresistas o por el contrario pasen a ser regentadas por los populares. Ello le daría un poder omnímodo a la formación de Rajoy en una provincia donde la inmensa mayoría de los municipios son gestionados por los socialistas, a excepción de una parte de los municipios del litoral costasoleño.

Amistad de Arenas con el candidato
Por ello no fue una decisión aleatoria el que José María Aznar debutase en Estepona. A estos intereses electorales hay que sumarle la gran amistad que une a Javier Arenas con el controvertido candidato del PP y notario de Estepona. De hecho que García Urbano sea el candidato popular a la alcaldía fue un auténtico dedazo del líder regional del PP que lo impuso sobre el candidato natural y presidente local, Ignacio Mena. La lista, compleja como su candidato, ha relegado a militantes históricos y no la califican en la localidad como una candidatura muy representativa de la ciudad.

Asistentes de "Gürtel" y "Malaya"
Lo cierto es que Arenas convenció a su siempre jefe, José María Aznar, para que respaldase en un acto público a su fichaje de Estepona. Tal vez lo que el amigo del extravagante Gadafi no sabría es que entre los centenares de personas que aplaudieron su alocución, había notables imputados tanto de la trama “Gürtel” como del “caso Malaya”. Alguien tal vez debería haber avisado a Aznar de ese hecho, porque hablar en Estepona de regeneración democrática siendo aplaudido y jaleado por representantes tan conspicuos de los principales casos de corrupción nacional y con el antecedente local de “Astapa” por medio, es un juego por lo menos peligroso sino frívolo.

Los aplausos "gurtelianos" de Galeote
Ricardo Galeote, ex secretario general del PP de Estepona y ex concejal del Ayuntamiento, era uno de los componentes del ramillete popular que asentía y apoyaba las palabras de Aznar. Galeote, imputado junto a su padre y su hermano -el eurodiputado Gerardo Galeote- en el “caso Gürtel”. Según un informe de la Policía el ex concejal del PP en Estepona,"valiéndose de su situación" en el Ayuntamiento, otorgó contratos a las empresas de la trama a cambio de viajes a Munich o al Caribe que pagaba la agencia Pasadena del presunto cerebro de la red, Francisco Correa.

Los asentimientos "malayos" de Hoffman
En el auditorio también estaba Juan Germán Hoffmann, al que se considera nada más y nada menos que el testaferro para negocios en el extranjero de Juan Antonio Roca, supuesto cerebro de la trama de corrupción "Malaya" en Marbella. Y tampoco fue casual que allí estuviera entre el público, Hoffmnn, ya que como el propio notario y candidato del PP, José María García Urbano ha reconocido, ambos son buenos amigos. Y tan amigos que formaron sociedad inmobiliaria antaño por la que en época de Gil se realizó una amplia construcción ilegal que precisamente ahora ha conseguido del Ayuntamiento de Marbella, gobernado por Ángeles Muñoz (PP), que legalice esa obra ilegal según el anterior PGOU.

Amigos, imputados, miembros del PP… y Aznar aplaudido por ellos mientras hablaba de regeneración.